Según las estadísticas, la cistitis en las mujeres es mucho más común que en los hombres, lo que se explica por las diferencias fisiológicas en la estructura de la uretra. Esta enfermedad suele ir acompañada de una serie de síntomas desagradables: dolor y dolor al orinar, micción frecuente y dolor en la parte inferior del abdomen.
La cistitis es una enfermedad común del sistema urinario. Se debe en gran parte a las peculiaridades de la estructura anatómica, por lo que la cistitis en las mujeres es mucho más común que en los hombres.
¿Cuáles son las causas y los primeros signos de la cistitis en las mujeres? ¿Cuáles son los principales síntomas de la cistitis femenina? ¿Qué tipos de cistitis se aíslan? ¿Qué médico trata la cistitis y cómo se trata la enfermedad en casa? ¿Es posible prevenir el desarrollo de cistitis y qué se debe hacer para esto?
Cistitis en mujeres: ¿es necesario hacer una cita con un médico?
La cistitis en las mujeres puede ser causada por diversas enfermedades infecciosas, invasiones helmínticas, cálculos en la vejiga, el inicio de la menopausia, la interrupción del sistema endocrino y la toma de ciertos medicamentos. Además, existe la cistitis intersticial, cuyo mecanismo exacto aún no se ha dilucidado.
También hay que señalar que la cistitis en la mujer puede ser aguda o crónica. La forma crónica se caracteriza tanto por recaídas frecuentes de la enfermedad como por una manifestación lenta e incesante de los síntomas.
Para evitar que la enfermedad se convierta en una fuente constante de malestar, es necesario hacer una cita con un médico ante los primeros signos de la enfermedad y someterse al tratamiento necesario. Todo lo que necesita hacer para esto es llamar a la clínica de perfiles. Los especialistas que se ocupan de este problema son los urólogos y los ginecólogos. Aunque, incluso un médico general puede tratar una forma sencilla de la enfermedad.
Para diagnosticar la cistitis en las mujeres, generalmente se realiza un análisis de orina, un frotis de la uretra y la vagina. En la forma crónica de la enfermedad, también se recomienda examinar la posible presencia de enfermedades de transmisión sexual (ETS).
Además, en algunos casos, son necesarios exámenes adicionales, para los cuales deberá pedir cita con un nefrólogo, hacer una ecografía de la pelvis pequeña o una cistoscopia.
Lo insidioso de esta enfermedad es que el tratamiento de la cistitis suele ser bastante fácil y los síntomas desagradables desaparecen rápidamente. Por lo tanto, muchas mujeres prefieren automedicarse comprando medicamentos antibacterianos anunciados en las farmacias.
Sin embargo, la falta de una terapia adecuada, su corta duración y la elección incorrecta de los medicamentos contribuyen a la transición de la enfermedad a una forma crónica que, a su vez, es difícil de tratar. Por lo tanto, no debe correr riesgos y utilizar los consejos de amigos para elegir medicamentos; es mejor llamar a su médico por teléfono y programar una cita. Debe recordarse que el tratamiento oportuno no solo evitará la cistitis crónica, sino que también salvará a otros órganos de la propagación de la infección.
¿Qué síntomas de la cistitis causan más molestias?
Los signos de cistitis aguda en las mujeres siempre se manifiestan repentinamente. Éstos incluyen:
- necesidad frecuente y fuerte de orinar;
- un mayor contenido de leucocitos en la orina y un cambio en su olor;
- la presencia de rastros de sangre en la orina;
- dolor cortante en la parte inferior del abdomen;
- ardor y dolor al orinar;
- aumento de la temperatura corporal.
Estos síntomas se desarrollan muy rápidamente. Aproximadamente cada cuarto de hora, una mujer tiene que ir al baño y la cantidad de orina en cada visita es mínima. Además, el espasmo de los músculos de la vejiga puede provocar incontinencia urinaria.
La cistitis tiene tendencia a recaer. La mayoría de las mujeres buscan ayuda al menos una vez al año.
En la forma crónica de la enfermedad, los síntomas son menos pronunciados. Por ejemplo, la incomodidad al orinar se manifiesta de manera bastante moderada. La frecuencia de ir al baño tampoco cambia. En general, una persona puede llevar una vida normal y asistir al trabajo (estudio).
Métodos para la prevención y el tratamiento de la cistitis.
Para conocer las posibles formas de prevenir y tratar la cistitis en el sexo débil, es necesario determinar las principales causas de la enfermedad. Éstos incluyen:
- características estructurales de la uretra en las mujeres (es más corta y ancha que en los hombres);
- fluctuaciones hormonales (embarazo, menopausia), que alteran el equilibrio de la microflora y debilitan la fuerza de la inmunidad local;
- infección del sistema urinario (puede ocurrir debido a una higiene personal insuficiente, relaciones sexuales sin protección);
- trauma (por ejemplo, al usar un catéter para desviar la orina).
La cistitis también puede presentarse como enfermedad concomitante con diabetes mellitus o urolitiasis. Por cierto, es imposible "ganarse" esta enfermedad por hipotermia. Y síntomas similares señalan el desarrollo de poliuria (diuresis por frío).
Por eso, lo primero que hay que hacer ante una cistitis es marcar el teléfono de la clínica y pedir cita con el médico. Solo un especialista experimentado, basado en pruebas, determinará la presencia de un proceso inflamatorio y prescribirá la terapia antibiótica correcta. Aliviará la mayoría de los síntomas desagradables durante los primeros días.
Además, el tratamiento de la cistitis implica tomar analgésicos y medicamentos antipiréticos. Los médicos recomiendan durante la terapia observar un régimen de bebida suficiente, lo que acelerará la recuperación (las bacterias se eliminarán más rápidamente del cuerpo con la orina).
Los expertos no se cansan de advertir que es peligroso automedicarse esta enfermedad. De hecho, muchas enfermedades del sistema genitourinario tienen síntomas similares a la cistitis bacteriana, que no se pueden curar con un fármaco antimicrobiano. Como resultado, puede perder un tiempo valioso y enfrentarse a una grave amenaza para la salud.
Las medidas para prevenir esta enfermedad son:
- higiene personal (cambio diario de ropa interior, cambio frecuente de toallas sanitarias, así como duchas periódicas);
- usar ropa interior adecuadamente seleccionada hecha de materiales naturales;
- tratamiento oportuno de todas las enfermedades existentes del sistema genitourinario;
- visitas obligatorias al baño y la ducha después de las relaciones sexuales.
Si el ataque le pilló en la carretera o de vacaciones, antes de buscar ayuda médica, debe intentar evitar la hipotermia, beber más líquidos, limitar el consumo de alimentos picantes y salados, así como el alcohol.
Si tiene cistitis crónica, antes de un viaje largo, debe visitar a su médico y discutir con él un conjunto de medicamentos que debe llevar consigo en el camino. Y también llevar (si es posible) su número de teléfono para comunicación de emergencia.